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Ser intencional significa tener siempre un por qué o una razón para tus decisiones y acciones. Vivir de esta manera ayuda a crear un espacio para el crecimiento y la paz en tu vida cotidiana. La vida intencional puede ayudar a inspirarte, mejorar las relaciones y crear claridad.
Hubo un tiempo en mi vida en el que siempre me preguntaba por qué las cosas nunca funcionaban a mi favor. No podía entender por qué las amistades terminaban, los ascensos no llegaban, o por qué parecía estar estancada. Entonces descubrí formas de manifestar estas cosas siendo intencional.
Comencé a tomar decisiones intencionales para lograr estas cosas. Hice el esfuerzo consciente de comunicarme mejor y de construir amistades, hice mi mejor trabajo en mi trabajo con la intención de recibir un aumento, e incluso di los pasos necesarios para solicitar el ingreso a la escuela de graduados.
Ahora, casi un año después, he recibido dos ascensos, tengo una red y un círculo de amigos cada vez mayor, y voy a empezar la escuela de postgrado este verano. Se necesitó un poco de auto-reflexión, y cambios en el estilo de vida para manifestar estas cosas. Sin embargo, ahora estoy viviendo la vida más positiva que he tenido en años y todo comenzó con la decisión de ser más intencional en mi vida diaria.
Si buscas ser más intencional siempre recuerda preguntarte: ¿por qué? No tienes que tener todo resuelto, y no se trata de ser perfecto. Pero, es un paso en la dirección correcta.
Aquí hay algunos puntos esenciales para empezar a ser más intencional en tu vida diaria.
1. Asumir la responsabilidad
Todos sabemos que la vida no es perfecta. Habrá giros y vueltas. Sin embargo, aceptar esto es una parte importante de ser intencional. Si aceptas que la vida no siempre resultará de la manera en que la planeas, puedes adaptarte más fácilmente a los contratiempos de aquí y de allá. Toma la decisión de aceptar las cosas desconocidas que se te puedan presentar.
2. Toma la decisión a diario
La vida intencional consiste en hacer el esfuerzo diario de vivir una vida que te agrade. Esto requiere tomar conscientemente decisiones que te pongan en la dirección que deseas.
Pregúntate a diario, «¿Qué estoy haciendo para lograr x, y, y z?»
Entonces, toma decisiones basadas en el logro de estas cosas. Una vez que empieces a preguntarte por qué y a tomar decisiones basadas en esto, empezarás a ver un cambio en tu vida.
3. Abrazar el proceso
La vida intencional no es una elección de un solo paso, de la noche a la mañana. Es un proceso continuo. Es un viaje personal que tendrás que abrazar para ver y sentir los resultados.
No hay un destino final o una línea de meta. Se trata de hacer pequeñas mejoras a lo largo del camino y ajustar tu forma de pensar.
Una vida intencional requerirá que seas grande en la comunicación contigo mismo y con los demás. Una vez que empieces a abrazar la auto-reflexión, hacer los pequeños ajustes será fácil.
Estos son los primeros pasos para vivir una vida que amas. Abraza los giros y vueltas, toma la decisión diaria de vivir una vida agradable para ti, y estar en constante comunicación contigo mismo.
Conoce tu por qué y toma tus decisiones basadas en los valores que son más importantes para ti.
