Este es un post de invitado para «Skills You Need».
¿Quieres contribuir? Averigua cómo.
Ver también: Superar los nervios
de la
presentaciónHablar
en público no es una tarea fácil, especialmente para aquellos que no están familiarizados con los matices de la oratoria. A menudo, los profesionales deben comunicarse con un público amplio, lo que requiere una comprensión tanto de las personas que escuchan como del tema en cuestión. Los buenos oradores saben que deben hablar de manera que el público pueda captar las palabras que están diciendo, y que atraiga a la multitud de más de una manera.
Los buenos oradores, por lo tanto, desarrollan y poseen ciertas cualidades y rasgos de personalidad que los distinguen de los oradores mediocres. ¿Cuáles son esas cualidades? Y, aunque no seas un orador, ¿por qué deberías desarrollarlas también? ¿Cómo pueden estos conceptos ayudarle a aprovechar su potencial y tener más éxito?
A continuación, algunas cualidades de los buenos oradores que pueden ayudar a cualquier persona a manejar mejor sus recursos y tener más éxito.
1. Están bien preparados.
Una de las cualidades más importantes de un buen orador es la capacidad de estar preparado. Cuando se lleva a cabo cualquier tipo de discurso público, generalmente se le da un tema en el que centrarse. Esto puede ser con el propósito de compartir sus ideas, elaborar su empresa, o simplemente para difundir la palabra sobre un determinado tema.
Si va a hablar, sea cual sea el tema que se le haya pedido que cubra, es importante que esté bien preparado y que pueda cautivar a su público. Empiece por crear un esquema o borrador de su tema. Mientras ensaye, intente variar su presentación de cualquier manera que pueda, porque una forma monótona de hablar podría aburrir a su público.
Sin embargo, ¿cómo se relaciona estar bien preparado con tener una vida exitosa? Dicen que el éxito nace cuando la preparación se une a la oportunidad. Las personas exitosas entienden lo importante que es prepararse para grandes oportunidades o eventos. Mientras que usted puede ser capaz de seguir la corriente, tenga en cuenta que los logros no se producen por casualidad o por ir con la corriente. Las oportunidades se disfrazan rutinariamente, y tu éxito depende de cuán preparado estés para aprovecharlas.
2. Ellos entregan mensajes e ideas únicas.
Una de las cualidades de un buen orador público es la capacidad de entregar un mensaje único. Las audiencias no quieren que se repita algo que ya han escuchado antes. Quieren escuchar una nueva perspectiva y quieren una nueva visión de las cosas. Darles una nueva perspectiva y un mensaje único puede hacer que toda su charla parezca más poderosa e impactante.
Una de las formas más fáciles de transmitir un mensaje único y poderoso al hablar en público es mantenerse fiel a sí mismo y a sus creencias. Todos pueden ofrecer una nueva y fresca perspectiva de la vida y elaborarla puede ayudarte a desarrollar un mensaje único.
Sin embargo, esto es más fácil de decir que de hacer. Aunque nadie nace con la capacidad de ser siempre único, y nadie puede llegar con ideas innovadoras todo el tiempo, algunas personas son naturalmente más creativas que otras. Para algunos, va a ser difícil ser el sobresaliente entre millones de otros, por lo que es importante que sepan que pueden tener dificultades al principio. Pero también saber que puedes lograr tus mejores pensamientos e ideas a través de la investigación y la preparación.
3. Proporcionan un contenido accionable.
Un buen orador público no siempre da un discurso o habla sólo para pasar el tiempo. Sus discursos públicos están generalmente diseñados para ayudar a la audiencia a mejorar lo que hacen o la forma en que piensan.
El mejor ejemplo de esto es alguien que habla de su nuevo negocio. Imagina que tienen la oportunidad de hablar a una gran audiencia sobre la nueva empresa y todo lo que hace. Pueden concentrarse en hacer llegar la información a la audiencia, pero mejorarán enormemente el compromiso si utilizan un enfoque orientado a la acción, proporcionando consejos para que la audiencia se los lleve.
Las grandes ideas no significan mucho sin la implementación y los pasos prácticos. Para los líderes o empresarios, esto significa dar tareas accionables a sus empleados, convirtiendo grandes objetivos vagos en otros más pequeños y alcanzables.
4. Pueden hacer que lo complejo sea simple.
A veces, un individuo se ha parado frente a una gran audiencia y ha explicado un concepto que no es exactamente simple. Aunque como orador público puede ser capaz de captar el concepto de lo que está hablando, el público no siempre puede seguir la lógica.
Una de las cualidades que poseen los buenos oradores es la capacidad de hacer simples incluso las teorías más complejas. Recuerda que tu audiencia puede no saber ni siquiera lo básico de lo que estás hablando, y debes redactar tu discurso de forma que les permita entenderlo todo desde el principio.
En la vida, la gente se siente más atraída por la simplicidad que nunca antes. Hacer lo complejo simple es la clave para lograr mejores resultados en muchos trabajos diferentes hoy en día. Por eso la capacidad de hacer algo simple para ti, para tu equipo o para tus clientes es crucial.
5. Son carismáticos.
Una de las cosas más difíciles de hacer es cautivar a su público mientras habla en público. El mejor enfoque de esto no tiene nada que ver con el tema que se aborda, sino más bien con la forma en que se transmite el mensaje. Esto se llama carisma.
El punto principal a tener en cuenta aquí es que para cautivar a tu audiencia necesitas sonar afable en la forma en que hablas, y tener confianza en la forma en que te mueves. Mantener el contacto visual, pararse con una gran postura y usar gestos de manos y expresiones faciales apropiadas es siempre importante. El ritmo con el que hablas también puede marcar una diferencia significativa.
En los negocios, el carisma cuenta. Mucho. Si quieres impresionar a tus clientes, esta será una de las habilidades más importantes a dominar. Necesitarás habilidades extraordinarias tanto en la comunicación verbal como en la no verbal.
Si no te sientes seguro de ti mismo y eres carismático en tu forma de hablar con la gente, no hay necesidad de forzarte. No te pongas nervioso ni parezcas distraído. Sólo sé auténtico y genuino mientras aprendes a usar un lenguaje corporal positivo puede ser un gran comienzo.
6. Siempre están abiertos a las preguntas.
Los oradores públicos a menudo rehúyen las preguntas porque no quieren saber inmediatamente cómo percibe el público la charla que están dando. Sin embargo, esto reduce el compromiso con los oyentes. Un punto importante de la oratoria es estar siempre abierto a las preguntas para poder comprometerse más con su público.
Las personas exitosas fomentan la retroalimentación. Prestan atención a lo que se les dice y escuchan con interés y mente abierta. Actúan y responden a las preguntas con empatía. Se fortalecen con la retroalimentación positiva y prosperan con la retroalimentación negativa. Aprenden a controlar el impulso de estar a la defensiva. Están abiertos a los sentimientos y a la crítica, sin tomarlo como algo demasiado personal.
7. Comparten en lugar de vender, dan en lugar de tomar.
Este es un punto que se aplica a aquellos que van a hablar en público sobre su empresa, profesión o producto. En lugar de tratar de vender su producto o idea, trate de compartir sus pensamientos al respecto. Esto hace que la charla parezca más genuina y puede resultar en que la audiencia opte por lo que usted tiene para ofrecer. Esto también ayuda a que el público se relacione más con usted o con su empresa.
Hacer lo que sea necesario para conseguir lo que se quiere no es el enfoque del éxito. Un mejor camino hacia el éxito se encuentra en el equilibrio entre dar y recibir. Adam Grant sugiere en su libro «Give and Take« que algunas de las personas más exitosas son dadores, no tomadores. Por lo tanto, es seguro decir que una de las mejores cualidades para cultivar para ser más exitoso miente es devolver a una comunidad y a la gente que te rodea.
Esto es lo que encuentro más magnético de los dadores de éxito: llegan a la cima sin cortar a otros, encontrando formas de expandir el pastel que les benefician a ellos y a la gente que les rodea.
– Adam M. Grant
Acerca del autor
Gigi es una escritora creativa, introvertida e inspirada y una comercializadora digital con sede en Tailandia. Con su experiencia en gestión empresarial, ha estado escribiendo sobre pequeñas empresas, nuevas empresas y la mejora de la carrera profesional en el sector digital desde 2012.
Actualmente escribe para E88 Bangkok, un espacio limpio y sofisticado con sede en Bangkok que es el escenario perfecto para su taller, seminario o boda.
Continúa
Hablar con eficacia
Consejos para una presentación efectiva
Ver también:
Autopresentación | Presentación de datos
Presentación a grandes grupos | Barreras de comunicación