Los dos tipos de inspiración (¿Usas ambos en tu trabajo y en tu vida?)

Es fácil pasar todo el día buscando inspiración. Puedes encontrar increíbles videos, artículos y noticias, y enviarlos por correo electrónico a todos tus amigos. Pero el mejor (y más duradero) tipo de inspiración viene de aplicar esos pedacitos de motivación externos a tus propios objetivos.

No te equivoques: es importante ser un aprendiz. Las personas exitosas en todos los campos absorben nueva información. Encuentran inspiración y motivación en el trabajo y el éxito de los demás.

Pero aquí está el problema: consumir el éxito y las ideas de los demás es una inspiración pasiva. Cada vez que ves un vídeo, lees un artículo o escuchas una entrevista, estás practicando la inspiración pasiva. Puede que aprendas algo, pero en realidad no tienes que hacer nada. Escuchar sobre el éxito de otras personas no es lo mismo que crear el tuyo propio.

En cambio, es a través del proceso de inspiración activa – el acto de crear cosas, aplicar nuevas ideas a nuestros objetivos y cometer errores – que descubrimos quiénes somos y qué es importante para nosotros. Además, la inspiración activa es lo que da como resultado la pasión y el entusiasmo a largo plazo. Observar el éxito de otra persona puede dejarle entusiasmado durante unos minutos, pero actuar y aplicar una nueva idea a su vida le inspirará más que cualquier cosa que otra persona pueda decir.

Aprender y escuchar puede ayudarte a pensar en las cosas de una manera diferente, pero crear, producir y experimentar es lo que te impulsa a seguir adelante. La inspiración pasiva puede darte ideas, pero la inspiración activa te dará impulso.

La mejor inspiración es la aplicación

Si te encuentras con una buena idea, úsala. Pasamos tanto tiempo tratando de encontrar cosas más inspiradoras para consumir que puede ser fácil para nosotros olvidar que la mejor forma de inspiración viene de lo que creamos.

Se trata de tropezar con una idea brillante y darle vida en tu trabajo. Se trata de encontrar una nueva estrategia y aplicarla a tus propios objetivos. Se trata de aprender un nuevo ejercicio y añadirlo a tu entrenamiento. La aplicación de las ideas siempre será más poderosa que las ideas mismas.

Demasiado a menudo pasamos nuestras vidas consumiendo el mundo que nos rodea en lugar de crearlo. Claro, hay cierta motivación en las ideas de otras personas, pero no olvides el poder que tienen tus acciones para inspirarte. La mejor inspiración viene de la aplicación de las ideas, no del consumo de las mismas.

Para más ideas sobre la inspiración, mira estos artículos: cómo motivarse, la diferencia entre profesionales y aficionados, cómo empezar, y los hábitos de la gente de éxito.

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Notas a pie de página

  1. Derek Sivers escribió sobre la inspiración y me inspiró para escribir este post. ¡Gracias Derek!
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